Crecimientos contrastados ace una semana se publicaron las estimaciones del crecimiento del PIB para el tercer trimestre de este año, tanto en Estados Unidos (EE. UU.) como en México (MX).
Los datos sugieren varios comentarios, cuya significación se acentúa si se insertan en el contexto histórico, digamos de los diez años más recientes. La gráfica que acompaña al texto es bastante conocida; la diferencia es que ésta cubre un periodo más extenso que el usual.
En resumen, lo sucedido permite las siguientes observaciones: 1.- lo largo del periodo total, la economía de EE. UU. creció (27%) mucho más que la de MX (15%); 2.- el PIB de MX se estancó durante 2019, mientras que el de EU siguió creciendo; 3.- el impacto negativo de la pandemia fue bastante más agudo "aquí", que "allá" y, 4.- este año, el crecimiento en MX será probablemente la mitad del que se registrará en EE. UU.; 5.- por tanto, ha ocurrido una reducción del tamaño relativo de la economía de MX.
Ante las cifras citadas, no me parece aventurado concluir que, dados los resultados dispares entre EU y MX, algo no se ha hecho bien en lo que atañe a las políticas económicas en nuestro medio.
Con la modestia que lo caracteriza, Joseph Stiglitz (JS) ha descrito el contenido de su libro más reciente en los siguientes términos (a la letra): "En The Road to Freedom, proveo una explicación clara directa de la libertad. desde la perspectiva de un economista del siglo XXI.. Las amenazas actuales la democracia --derivadas del populismo autoritario-- surgen de los gobiernos que hacen muy poco, no de los que hacen demasiado" (Citado en Project Syndicate, 2024).
No he leído el libro en cuestión, pero conozco lo su ficiente de la ideología de JS para arriesgar un par de comentarios al respecto. Primeen lo que toca al nombre de la obra, se trata del opuesto al título de un clásico: The Road to Serfdom, de Friedrich Hayek (FH), publicado por primera vez en 1944.
Segundo, la tesis principal de FH consiste en que la amenaza principal a la libertad es, precisamente, la ampliación de la esfera del gobierno en todos los órdenes de la vida social. Los extremos de ello son, por supuesto, el socialismo y el comunismo.
FH ganó el Premio Nobel en 1974 --curiosamente junto Gunnar Myrdal-- por sus contribuciones al entendimiento de los ciclos económicos. Sin embargo, su aportación posterior más importante consistió en destacar la enorme complejidad del sistema económico y, por tanto, la imposibilidad de una centralización eficiente de las decisiones. ¿Por qué? Por la carencia de la información necesaria.
JS ganó el Nobel en 2001, junto con George Akerlof Michael Spence, por sus análisis de lo que se llama "información asimétrica", que puede propiciar la existencia de "fallas del mercado", corregibles mediante la intervención del gobierno. Ello supone, con optimismo irrealista, que la burocracia sabe puede cómo hacerlo.
En todo caso, el populismo que preocupa a JS ha merecido el siguiente juicio de Francis Fukuyama, un distinguido politólogo de la Universidad de Stanford: "Los líderes populistas buscan usar la legitimidad conferida por una elección democrática para consolidar su poder. Reclaman una conexión carismática directa con 'el pueblo', que definen a menudo en términos estrechos que excluyen grandes partes de la población. No les gustan las instituciones y buscan minar los pesos contrapesos que, en una democracia liberal moderna, limitan el poder personal del líder: las cortes, la legislatura, los medios independientes; una burocracia no partidista". (Identity. 2018). En otras palabras, los peligros para la democracia se originan en gobiernos que hacen demasiado.. exactamente lo contrario de lo que piensa JS.
Por cierto, en su momento (2007), JS elogió abierta y repetidamente la política social económica de Hugo Chávez. No he sabido que se haya disculpado por haber avalado lo que ocasionó en Venezuela un desastre de proporciones históricas.
El autor es profesor de Economía de EGADE Business School.
Artículo publicado originalmente en Reforma.