El aprendizaje permanente, clave para el futuro de las organizaciones

Vivimos en una era donde la imaginación es indispensable – la necesitamos para resolver los grandes retos de la humanidad, desde las pandemias y el cambio climático, hasta la pobreza y la desigualdad— y su éxito radica en materializarla a través de la innovación y el emprendimiento.

Pero también en desarrollar competencias como la adaptación al cambio, la agilidad y la flexibilidad, la resiliencia y el pensamiento estratégico y sistémico. Todas estas competencias son claves para navegar por un entorno volátil e incierto cuya premisa pareciera ser “aprende durante toda la vida”.

Para que las organizaciones respondan ágilmente a este entorno, sus colaboradores deben aprender continuamente, adquirir nuevos conocimientos y desarrollar o fortalecer competencias profesionales y personales.

Vivir en un ambiente de aprendizaje permanente no sólo implica aprender algo vital para el futuro cercano, sino también desaprender lo que sabemos.

Este entorno, dinámico y cambiante, invita a que las organizaciones identifiquen nuevas maneras de formar a sus colaboradores más allá de los cursos o programas formales de capacitación. Aquí también se requiere agilidad y flexibilidad.

Una excelente propuesta en este sentido son las credenciales alternativas, definidas como la adquisición de competencias y conocimiento provenientes de actividades no relacionadas con un título profesional o grado.

Se caracterizan por promover lo que se conoce como reskilling & upskilling –actualización de conocimientos y desarrollo o fortalecimiento de competencias en formatos accesibles, asequibles y efectivos—, permitiendo su aplicación inmediata en el lugar de trabajo.

Cada vez más encontramos opciones de formación bajo este esquema, la mayoría de ellas se ofertan en línea, lo que supone una fuerte autogestión del colaborador para su propia formación.

Por ejemplo, plataformas como Alternative Learning, se enfocan en ejecutivos, profesionistas y emprendedores interesados en aprender de forma innovadora una competencia o habilidad concreta desde la comodidad de su casa, de forma flexible y a su ritmo, logrando acelerar su crecimiento profesional.

Como herramienta educativa, esta plataforma responde a la creciente demanda de experiencias de aprendizaje alternativo especialmente diseñadas para el entorno digital, fáciles de consumir desde cualquier dispositivo y de alta calidad.

Su corta duración y contenido especializado en temas como transformación digital, negociación, innovación, economía circular o habilidades blandas, atraen a alumnos que buscan una actualización en un “instante”.

Las credenciales alternativas se comienzan a categorizar con los siguientes formatos:

1. Programas de formación que otorguen alguna certificación o cursos cortos basados en habilidades como los bootcamps: se trata de programas en línea inmersivos, intensivos y prácticos, para profundizar en temas de actualidad como emprendimiento, experiencia del usuario, creación y diseño del futuro.
2. Cursos masivos abiertos en línea: son cursos especializados y de aprendizaje en tiempo real para fortalecer competencias basadas en los negocios de actualidad.
3. Microgrados en línea: cursos en tópicos como negociación, liderazgo, emprendimiento e innovación.

El aprendizaje permanente permitirá a las organizaciones sobrevivir por más tiempo.

Según el último reporte de Deloitte, “2020 Global Human Capital Trends”, 74% de los directivos de recursos humanos entrevistados asegura que el reskilling & upskilling será muy importante en los próximos 12 a 18 meses, mientras que el 50% comentó que más de la mitad de los colaboradores requerirán cambiar sus habilidades en los próximos tres años.

Lo anterior indica la necesidad de identificar nuevas alternativas de actualización: diferenciadas, ágiles y flexibles, y de asumir una cultura que permita el tiempo y la accesibilidad a sus colaboradores para adquirir y aplicar el nuevo conocimiento de forma inmediata.

Artículo publicado originalmente en Fortune en Español.