Videojuegos y aprendizaje: Desbloqueando nuevas habilidades de negocios

Los videojuegos ofrecen una experiencia inmersiva, interactiva y lúdica que conecta con millones de personas en todo el planeta. Su popularidad ha crecido significativamente en las últimas décadas, expandiéndose más allá del entretenimiento hacia ámbitos como el entrenamiento militar y la educación. La capacidad que tienen los videojuegos de incrementar el compromiso con el aprendizaje los convierte en una herramienta estratégica para abordar los retos educativos y potenciar el desarrollo de habilidades en las organizaciones.

Cada vez más instituciones educativas están incorporando la gamificación o ludificación --estrategia que consiste en aplicar técnicas de juego— para mejorar los procesos de aprendizaje y enseñanza, conectar a los estudiantes con el mundo real y desarrollar competencias clave como el pensamiento crítico y la creatividad. En este contexto, las escuelas de negocio necesitan implementar estrategias didácticas innovadoras que desafíen la educación tradicional para generar impactos multiplicadores.

En EGADE Business School, recientemente se realizaron varias experiencias de aprendizaje que incorporaron el uso de videojuegos, en particular Minecraft y Overcooked. La investigación realizada busca corroborar que los videojuegos permiten a los estudiantes desarrollar habilidades blandas o soft skills. Algunos de los hallazgos fueron publicados en el capítulo “Minecraft, herramienta de aprendizaje basado en juegos: análisis del impacto en el desarrollo del pensamiento crítico y creativo en la resolución de retos objetivos de desarrollo sostenible (ODS)” (Horizontes en el aprendizaje vinculado con el desarrollo sostenible: Nuevas vías en la era digital, 2024).

Minecraft: Construyendo el pensamiento crítico y creativo

La plataforma educativa Minecraft –una especie de LEGO digital que utiliza bloques con formas tridimensionales que se ensamblan— se considera una herramienta para el desarrollo del pensamiento crítico y creativo, ya que estimula el pensamiento divergente de los estudiantes. Este pensamiento se caracteriza por ampliar el espectro de posibles soluciones a problemas, orientándose a que los estudiantes experimenten y generen ideas que pueden transformarse en soluciones no tradicionales.

La primera experiencia en la que se aplicó Minecraft fue Impact Challenge by OXXO, en la cual ocho equipos de estudiantes debían resolver de forma creativa un reto basado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. El videojuego Minecraft les permitió desarrollar el prototipo de la solución y presentar el pitch. En la segunda experiencia, el videojuego ayudó a los alumnos del curso Mentalidad Emprendedora a cambiar la forma de proponer soluciones a problemas inherentes de la sociedad a través del diseño de un proyecto de emprendimiento.

Adicionalmente al uso de videojuegos como herramienta educativa, se incorporaron al diseño de estas experiencias académicas otras estrategias didácticas que facilitan el desarrollo transversal de competencias clave para el futuro de los estudiantes. En ambas experiencias, Minecraft se combinó con otras técnicas andragógicas, como challenge-based learning y design thinking. La integración de multiexperiencias de aprendizaje activo en el aula contribuye a captar la atención del estudiante y motivarlo, creando ambientes colaborativos de aprendizaje. De hecho, los alumnos destacaron de estas experiencias la mejora en el trabajo colaborativo y la integración del equipo, así como el desarrollo del pensamiento crítico y la creatividad, habilidades clave para el campo laboral.

Overcooked: La receta para desarrollar habilidades de negociación

En otra experiencia, se realizó una actividad con el juego Overcooked, un videojuego colaborativo donde los participantes deben preparar recetas en una cocina. El ejercicio es utilizado para crear un espacio de colaboración y trabajo en equipo, en el cual alguien lidera y alguien ejecuta, y constantemente los participantes deben gestionar el tiempo, coordinar acciones y tomar decisiones estratégicas bajo presión. Esto tiene un impacto positivo en el análisis crítico del rol del equipo en los procesos de negociación, definiendo los roles del equipo con base en habilidades individuales de cada miembro.

Una vez conformado el equipo y establecidos los roles, el objetivo del juego es lograr entregar la mayor cantidad de platillos en el menor tiempo posible. Esto implica una acción coordinada, un gran flujo de información entre los participantes, mucha coordinación y buen liderazgo para lograr el objetivo. A través de esta inmersión en un entorno gamificado, los estudiantes desarrollaron habilidades de negociación y fortalecieron competencias clave como liderazgo, trabajo en equipo, comunicación efectiva y resolución de conflictos. Overcooked no solo convirtió la negociación en una experiencia inmersiva y divertida, sino que también reforzó el aprendizaje en la clase.  

No obstante, la implementación de estas actividades presenta varios retos, entre los cuales destacan el conocimiento de su uso y beneficios por parte de los docentes para poder obtener su máximo potencial en el entorno educativo. La capacitación y el acceso a herramientas adecuadas resultan fundamentales para que los profesores puedan integrar estas estrategias de manera efectiva, alineándolas con los objetivos pedagógicos y fomentando un aprendizaje significativo. Esto permitirá no solo incorporar más y mejores experiencias con rigor, sino también fortalecer la innovación educativa y optimizar el impacto de estas metodologías en el desarrollo de habilidades clave en los estudiantes.

En EGADE Business School, el área de Innovación Educativa juega un papel clave en la implementación de estas estrategias. A través de un acompañamiento constante, se busca que cada experiencia de aprendizaje sea significativa, alineando el uso de herramientas innovadoras con un enfoque de aprendizaje. A medida que la educación evoluciona, el uso de videojuegos no solo hace que el aprendizaje sea más dinámico y motivador, sino que también prepara a los estudiantes para enfrentar los desafíos del mundo real con creatividad y colaboración.

Los autores son directora de Innovación Educativa en EGADE Business School (Eloísa Pérez), profesora del Departamento de Estrategia y Liderazgo de EGADE Buisness School (Luciana Manfredi) y profesor del Departamento de Emprendimiento e Innovación Tecnológica de EGADE Buisness School (Jairo Orozco).