El (estadísticamente) elusivo nearshoring

Artículo publicado en la sección Glosas Marginales de Reforma

Un distinguido economista (Manuel Sánchez) ha comentado, con fina ironía, que el famoso nearshoring tiene un exceso de comentarios y un déficit de datos. Una ojeada a los números sobre la Inversión Extranjera Directa (IED), publicados por Banxico, quizá sirva para aclarar algunos puntos de vista.

En términos anuales, la cifra correspondiente a 2022 fue más o menos igual que la referente a 2015: apenas 0.76% más alta. Así pues, en tales términos, la IED no ha mostrado realmente los publicitados efectos expansivos del nearshoring. Es cierto que ya se recuperó de la caída registrada como consecuencia de la pandemia, pero no mucho más. (Gráfica uno)

 

Los números "duros" más recientes sobre la IED pertenecen sólo al primer trimestre del 2023. Así considerados, parecen darle sustento a la noción de un auge, pero ello admite tres acotaciones: 1. La IED fue inferior a la correspondiente al mismo trimestre del año previo. 2. Su componente de "nuevas inversiones" fue el más bajo del periodo examinado. 3. Específicamente, casi el 90% de la IED computada para el lapso en cuestión se catalogó en el rubro de "utilidades reinvertidas". (Gráfica dos)

De paso, es relevante notar que, en los años más cercanos al actual, la IED observada en el primer trimestre ha representado más de la mitad de la que se acumula en los 12 meses. Desde este punto de vista, los datos disponibles para este año no revelan al nearshoring como un factor inusual.

De paso, las cantidades de IED mencionadas en ciertos discursos políticos son ejemplos valiosos de wishful thinking.

Nada de lo apuntado pretende desestimar la potencialidad de la redirección geográfica de la IED con destino a México. Pero, como he señalado en varias ocasiones, su realización plena depende de la existencia de un clima favorable de veras para la inversión, sea extranjera o sea nacional. No es el caso todavía, por mucho, lamentablemente.

Un breviario doble

1.- Según la Encuesta Nacional sobre los Ingresos y los Gastos de los Hogares, levantada y publicada cada dos años por el INEGI, de 2016 a 2022, el ingreso (corriente, promedio trimestral) aumentó 0.20% en términos reales. En lenguaje llano, prácticamente se estancó. A ese paso...

2.- Muchos analistas se han ocupado de desmenuzar a conciencia los abundantes datos de la inflación computada para julio. El énfasis más común ha sido positivo, con razón. Empero, al prestarle mucha atención a los árboles se corre el riesgo de no ver el bosque: lo cierto es que la inflación sigue siendo muy alta. Y es verdad también que una parte se sustenta en presiones de demanda internas. No es irrazonable imaginar, como hacen muchos augures, que "cerrará" 2023 alrededor de 5%.

Banxico hizo bien al mantener sin cambio la tasa de interés.
 

El autor es profesor de Economía de EGADE Business School.

Artículo publicado originalmente en Reforma.

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