El rublo

¿Aceptaría rublos por algo que exportara o un servicio que prestara a otro país?

A raíz de la pregunta de un lector y de un comentario en el sentido de que el objetivo de “la invasión de Rusia a Ucrania era debilitar al dólar en favor de fortalecer el uso del Rublo y del Yuan”, vale la pena analizar los porqués y lo plausible que pudiera resultar.

De acuerdo con el CFA: “El régimen monetario ideal de un país tendría tres propiedades … se debería fijar de manera creíble … eliminando la incertidumbre relacionada de la moneda con respecto a los precios de los bienes y servicios. En segundo lugar, debiera haber convertibilidad total (las monedas deberían poder intercambiarse libremente independientemente del propósito y en cualquier cantidad) … asegurando el flujo irrestricto de capital. En tercer lugar, cada país podría ser capaz de adoptar una política monetaria independiente buscando cumplir objetivos como su crecimiento y control de la inflación.”

(Continuando) “Durante la mayor parte del siglo XIX hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial, el dólar americano y la libra esterlina operaron con el patrón oro: El precio de cada moneda se fijó en términos de oro.” Este mecanismo lograba que, cuando se exportaba, se recibía oro y por tanto había que aumentar el monto en circulación de la moneda local, lo que generaba inflación (mayor cantidad de dinero en circulación sin aumento del producto). Esto hacía que se redujeran las exportaciones, el ingreso de oro y por tanto la emisión de moneda local, manteniendo bajo control a la inflación. Sucedía lo contrario cuando se importaba.

Si bien no se imprimiría mas moneda de la que amparara la cantidad de oro disponible, en caso de recesión, no se podrían aplicar políticas monetarias contracíclicas. El proteccionismo de la época hizo que el comercio mundial se redujera en un 50% y se abandono el patrón oro.

En 1944, en Bretton Woods, 44 países se unieron para fijar la paridad de diversas monedas entre sí. Cuando había desequilibrios persistentes, se ajustaban las paridades. Para 1973, debido a la altísima inflación (para Estados Unidos eran niveles cercanos al 20%, algo que en Latinoamérica sería benevolente), se firmaron los acuerdos Smithsonian dejando libre flotación.

La filosofía atrás de esto es, ¿a quien se le confía el fijar las paridades cambiarias? ¿A los gobiernos o a los mercados? Ese es el quid del asunto. ¿Hay capacidad en los gobiernos para determinar los precios (de lo que sea)? ¿Qué previene que los políticos hagan y deshagan a su conveniencia o ideología? La evidencia es la mismísima Rusia: ya no hay una Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas porque quebraron. Por el contrario, ¿cuantos episodios especulativos ha habido a lo largo de muchas épocas y geografías? También ha habido intentos “intermedios”: Europa entró en bandas de flotación pero las abando. No es necesario recordar la consecuencia de las bandas de flotación en México.

Rusia fijó el rublo a principios de mayo al equivalente de 5,000 rublos por onza de oro. De acuerdo con Forbes, “El rublo cotizaba entre RUB/USD $70 - $80. Después de las sanciones se desplomó a $120 y se recuperó a $80 … por la vinculación al oro”. Esto les funcionará mientras se necesite seguir comprando gas ruso, su principal exportación (que financia la invasión).

¿Aceptaría rublos por algo que exportara o un servicio que prestara a otro país? ¿Cree que le aceptarían rublos para hacer el super, viajar, comprar un refrigerador o un auto?

El concepto de Fiat Money y la paradoja del dinero nos dan otra perspectiva: el dinero es aceptado por que es aceptado. Suerte en su intento (la necesitarán).

El autor es profesor de Finanzas de EGADE Business School.

Publicado originalmente en El Financiero.

Ir a opinión
EGADE Ideas
in your inbox