Tasas de interés al alza

Las buenas noticias de mayores tasas de interés es que podremos ver mayores rendimientos para los ahorradores

La inflación global está en niveles elevados y los economistas que predecían un efecto transitorio de los precios ya se han retractado. Ante este fenómeno la mayoría de los bancos centrales del mundo han comenzado un proceso de alza de tasas de interés para mitigar el efecto adverso de los precios en la economía. Existen excepciones como es el caso extraordinario de Turquía que insiste en apagar el fuego con gasolina, es decir, reducir las tasas de interés ante crecientes presiones inflacionarias. El resultado ha sido desastroso.

Ante este entorno la Reserva Federal de los Estados Unidos ha anunciado el comienzo del ajuste al alza de las tasas de interés de mercado. Los mercados financieros han reaccionado a la baja con correcciones importantes en sus principales índices. Esto sucede debido a un reacomodo de portafolios de inversión de activos variables a fijos. Además de ello, ante mayores rendimientos por ahorrar en dólares, se puede esperar el fortalecimiento de esa moneda.

Por otro lado, mayores tasas de interés tienen un impacto adverso en la economía real disminuyendo los créditos en la economía y desincentivando a la inversión productiva. Si bien esto es cierto, en EUA el plan de infraestructura ambicioso del gobierno federal compensará la desaceleración de la inversión privada que se pudiese observar por el incremento gradual de las tasas de interés. Además, considerando que la tasa de interés objetivo se ubica en niveles históricamente bajos, existe espacio para elevarla gradualmente sin provocar un impacto abrupto adverso en la economía real.

El impacto en México no será menor. El Banco de México deberá seguir de cerca las acciones del Fed. Si no actúa de manera paralela podría afectar el diferencial de tasas entre los dos países lo que provocaría una salida neta de flujos de capitales. Lo anterior depreciaría a la moneda nacional. Además, se corre el riesgo de perjudicar las expectativas inflacionarias en el mediano plazo.

Las buenas noticias de mayores tasas de interés es que podremos ver mayores rendimientos para los ahorradores. Además, se normalizaría la política monetaria ultra acomodaticia global que había disminuido las herramientas de política económica ante episodios de crisis. Las economías globales continuarán creciendo, a tasas más moderadas que las anticipadas, y se espera que la inflación comience una tendencia a la baja en la mayoría de las economías. La inflación es el impuesto más dañino para la sociedad, sobre todo, para las familias de estratos de ingresos más bajos.

El autor es profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School.

Publicado originalmente en El Financiero.

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