Recesión y oportunidades de inversión

La economía de EE. UU. podría entrar en recesión en 2023

Esta semana la Reserva Federal de los Estados Unidos publicó las minutas de política monetaria donde por primera vez menciona que la economía podría entrar en recesión el próximo año. Aunado a ello, los indicadores macroeconómicos más recientes de EE. UU. sugieren que el sector industrial comienza a desacelerarse. El PMI manufacturero de noviembre se ubicó por debajo del umbral de los 50 puntos, es decir, en contracción por primera vez en el año. Esto después de un crecimiento en el tercer trimestre que superó las expectativas de mercado. Asimismo, el mercado laboral ya comienza a perder dinamismo. Las solicitudes de desempleo en el mes de noviembre se están elevando.

Así, todo indica que la economía de EE. UU. podría entrar en recesión en 2023 como resultado de condiciones crediticias más rígidas que están mermando al consumo y la inversión en ese país. La persistente alza de las tasas de interés se realiza para mitigar a una inflación elevada. De hecho, al parecer la inflación ya está consolidando una tendencia a la baja.

Para México esta conyuntura no es nada favorable ya que impactaría adversamente en la economía real. Tanto las exportaciones netas, donde más del 80 por ciento se dirigen hacia EE. UU., y las remesas mostrarían una pérdida de dinamismo. Habrá que seguir de cerca las principales variables macroeconómicas del país en un entorno donde también el Banco de México está subiendo tasas de interés.

Este entorno es demandante pero también nos da oportunidades de inversión interesantes. La continuidad del alza de tasas de interés está desvalorizando a los mercados financieros. Sin embargo, será importante seguir de cerca a las autoridades monetarias para identificar cuándo revertirían su política monetaria restrcitiva. Será entonces momento para comprar en un mercado barato. Mientras tanto, los activos de renta fija como los bonos de gobierno y corportivo nos protegen contra los efectos adversos de la inflación.

Asimismo, con el incremento de tasas de interés se está elevando la cartera vencida del sector hipotecario. Es decir, habrá una sobre oferta de vivienda lo que es probable deprima los precios de dicho sector. Esto será una gran oportunidad de inversión, sobre todo en EE. UU., cuando en 2023 se observe una caída importante en los precio de la vivienda.

Así, habrá opciones de comprar “barato” en 2023, tanto en el sector financiero como en el sector inmobiliario. La clave para entrar y aprovechar el mercado será interpretar y leer adecuadamente los mensajes de la Reserva Federal.

El autor es profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School.

Publicado originalmente en El Financiero.

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