Las oportunidades con Tesla

Esta semana se anunció que Tesla, la armadora de automóviles eléctricos más grande del mundo, invertiría alrededor de 10 mil millones de dólares en una planta en Monterrey, Nuevo León. Esta inversión representaría alrededor de 2.5 veces la inversión total que recibió Nuevo Leon en 2022.

El anuncio fue antecedido de mucha incertidumbre ya que el Presidente de la República había asegurado en varias ocasiones que no permitiría que dicha planta se estableciera en Monterrey debido, según él, a la escasez de agua en la entidad.

Cabe recordar que, según datos de Conagua (que es un organismo público federal), el 60 por ciento del consumo del agua corresponde al sector agrícola contrastando con solamente 4 por ciento del sector industrial.

Para Tesla el consumo represetaría solamente alrededor de 0.3 por ciento del consumo de agua total, según un estudio de Reforma, y se abastecería de aguas residuales y tratadas. Además, durante 2022 la entidad recibió el 50 por ciento de la inversión por el “nearshoring”, empresas que también consumen agua y no ha tenido problemas en el suministro del agua.

Afortunadamente, la postura del gobierno federal se revirtió y permitió la instalación de la empresa en la entidad. Esta inversión es importante porque no solo generará empleos directos sino que habrá externalidades positivas en el ecosistema de la región y del país.

Primero, porque detonará la industria de proveedurías nacional que abastecerá a la planta automtriz. Segundo, porque contrbuirá con empleos directos bien remunerados (mano de obra calificada). Tercero, porque detonará empleos indirectos en la región relacionados con el sector de los servicios. Cuarto, porque generará un pago importante de impuestos tanto federales como locales. Finalmente, elevará el crecimiento potencial de la región y del país.

Así, el nearshoring está beneficiando al país debido a su cercanía con EE. UU. y el TMEC, que le dan una ventaja competitiva. Sin embargo, cabe destacar que países como Chile, Colombia, Brasil y Perú está atrayendo más inversión extranjera que México (datos de 2022). La intervención e injerencia del estado mexicano en el sector industrial y del mercado nacional está limitando el potencial de crecimiento de la inversión extranjera en el país.

Las decisiones autoritarias ya cancelaron proyectos de inversión importantes como el NAIM y la cervecería en Mexicali, afortunadamente no fue el caso de Tesla en Monterrey. Sería más sano y eficiente que las decisiones de inversión se tomaran en base a estudios científicos y de costo-beneficio, y se dejara a merced de las entidades federativas. Es absurdo que la federación intervenga en todo momentos retrasando el desarrollo de la economía.

La inversión de Tesla se dio a pesar de la injerencia del gobierno federal.

El autor es director general de Soluciones Financieras GAMMA y profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School.

Artículo publicado originalmente en El Financiero.