Este mes ha sido realmente emocionante y algo tenso debido a que me embarqué en un gran proyecto. Por primera vez puedo decir que siento que mi trabajo me permite ayudar directamente a juventudes LGBTQ+, mi comunidad. Me he acostumbrado a la carga laboral, a trabajar desde casa, a manejar los quehaceres y cuidado de mis familiares (la diabetes de mi padre, la hipertensión de mi nana, mi hermano también trabajando desde casa...). Pero como cereza en el pastel, todxs hemos de mantenernos con bienestar emocional.
Por si lo anterior no fuese suficiente, la semana pasada recibí la llamada de un amigo cercano informandóme sobre su diagnóstico de cáncer terminal. Pero algo aún más caótico pasó en mis emociones cuando me di cuenta de que había decidido no tomar el tratamiento. Unas semanas después murió.
Pasé gran parte de mi tiempo intentando enfocarme en mi trabajo y aplicar la famosa frase fake it until you make it (finge hasta que lo consigas). A las pocas horas, recibí una cantidad estrepitosa de mensajes intentándome hacer sentir bien con palabras positivas de afirmación. Para ser honesto, necesitaba todo menos eso.
“Trata de mantener un actitud positiva”
“Él está decidiendo lo que es mejor para él”
Sin embargo, hubo un mensaje que sobresalió entre todos los demás, que logró reconfortarme un poco.
“Es perfectamente comprensible cómo te sientes. Era uno de tus más antiguas amistades”.
Llamé de inmediato a esa persona y le dije tal y como me sentía: devastado, solo, en shock, sorprendido, enojado. Esta persona fue la única que me hizo sentir que no estaba mal sentirme como me sentía.
Por primera vez en mi vdia, pude experimentar los efectos nocivos que la positividad tóxica inyecta en nuestra sociedad. Un concepto que había escuchado constantemente, pero jamás había sentido.
¿Qué está mal sobre la positividad tóxica?
Hoy te invito a que te repitas a ti mismo que está bien no estar bien. Pero, sobre todo, que jamás asumas que porque un colega está sonriente esto significa que está teniendo un excelente día. Muchas personas prefieren poner cara de póker antes que enfrentar sus emociones. También te invito a recordar que esta bien pedir ayuda en esos momentos en las que las emociones te sobrepasan.
Nota: Mis opiniones son por cuenta propia