Se llaman "unicornios", son Startups de reciente creación; con valuación superior a un mil millones de dólares.
Estas empresas ofrecen tecnologías y modelos de negocio disruptivos. Hoy estos unicornios (e.g. Uber, Airbnb, SpaceX) siguen creciendo impulsados por un mercado alcista y en algunos casos, por contar con grandes corporativos como parte de sus inversionistas.
Los grandes corporativos buscan innovar para diferenciarse y establecerse ventajosamente ante la competencia.
El principal objetivo de innovar es crear fuentes de crecimiento y rentabilidad. En los últimos años hemos visto un creciente número de fondos por parte de corporativos invirtiendo en Startups. Corporate Venture Capital (CVC) significa que grandes corporativos como GE, Intel, Unilever, Johnson & Johnson, realizan inversiones en Startups logrando una participación accionaria en el Startup que opere en algún sector industrial adyacente del corporativo.
En 2015 fondos de CVC globales participaron en 1301 inversiones financiando 28.4 mil millones de dólares, resultando un aumento del 70 por ciento respecto el año anterior, impulsando mega-rondas a los unicornios Didi, Kuaidi, SoFi, Jet entre otros.
El vínculo que se crea entre el corporativo y el startup permite exponer al corporativo a nuevas tecnologías y mercados, mientras al startup le permite validar sus modelos de negocio y escalar comercialmente de la mano de un corporativo facilitándole la adquisición de clientes.
A diferencia de un fondo tradicional de Venture Capital el fondo CVC normalmente recurre a recursos propios del corporativo. Adicionalmente se espera como objetivo el que estas inversiones en Startups traigan retornos estratégicos y económicos para el corporativo.
Esta actividad se concentra en Estados Unidos en cinco ciudades principalmente: Silicon Valley 55 por ciento, Nueva York 15 por ciento, Boston 12 por ciento, Denver 3 por ciento, y Austin 3 por ciento. Sin embargo, esta inversión corporativa crece en Asia, pues aunque los Startups de Estados Unidos recibieron el 69 por ciento de los fondos CVC globales, en posición número 2 se encuentra Asia y en número 3 Europa.
Algunos corporativos en México comienzan a seguir esta práctica global. Sin embargo, lo hacen más a través de aceleradoras corporativas. Empresas tales como Telefónica, Cinépolis, Volaris, Axtel, Coca-Cola, Grupo Expansión, Hoteles City Express, Ternium, y Banregio han comenzado a crear iniciativas de impulso e interacción con Startups. Para la mayoría de ellos el siguiente paso es invertir en ellos. En México el más activo CVC es Wayra de Telefónica con más de 50 Startups en su portafolio.
Durante el 2016 Axtel, de Grupo Alfa, se comprometió a explorar innovaciones disruptivas lanzando NAVE, su aceleradora corporativa y siete Startups fueron seleccionadas para correr su proceso de aceleración de cuatro meses que permitió a Axtel estar expuesto a estas innovadoras Startups para explorar iniciativas de crecimiento y rentabilidad.
Es así que con el propósito de fomentar el conocimiento de esta actividad, el Centro de Innovación y Emprendimiento (CIE) de la EGADE Business School del Tecnológico de Monterrey, lanzó la Red de Empresas Innovadoras (REI) a la cual se han sumado empresas como Proeza, Xignux, Deacero, Heineken, Axtel, Arca, BanRegio, Frisa, Cemex, Ternium, y otras más, que están siendo consideradas. En la REI se busca crear conciencia en México para que los grandes corporativos se familiaricen con las mejores prácticas de empresas tales como Apple, Intel, Motorola, BMW, Ford, Honda, Nestlé, Starbucks, Caterpillar, Honeywell, Roche, y GlaxoSmithKline, entre otras, invierten millones de dólares en Startups.
Durante el 2015, se crearon 52 nuevos fondos CVC en el mundo. Once en Estados Unidos, 2 en Alemania, 16 en China, 13 en Japón, 2 en India, y 2 en Corea del Sur. El CVC no es exclusivo de países desarrollados y México no es la excepción, la actividad CVC ha despertado interés por ciertas empresas que comienzan a interactuar con Startups – estas grandes empresas se estima destinen recursos financieros a Startups para alcanzar sus metas de crecimiento y rentabilidad, logrando así sostener la supervivencia y trascendencia de la empresa.
*Por Félix Cárdenas, Director del Centro de Innovación y Emprendimiento Corporativo EGADE.
Publicado originalmente en El Financiero