La búsqueda de la sostenibilidad se ha convertido en una herramienta poderosa para hacer crecer los negocios. Los proyectos de sostenibilidad a menudo son cofinanciados por empresas y gobiernos locales. En las economías en desarrollo, las políticas públicas se están enfocando en la disrupción macroeconómica debido a los problemas de sostenibilidad. Por ello, las grandes empresas están desarrollando alianzas con los gobiernos locales en asociaciones público-privadas (APP) para implementar normas y mejorar su valor social. Estas APP pueden generar conciencia social e inculcar una forma de consumo sostenible.
En este contexto, la investigación basada en desafíos es un viaje sistemático para explorar soluciones a problemas sociales e industriales, como discutimos en nuestro nuevo libro Challenge-Based Learning, Research and Innovation. Leveraging Industry, Government and Society (Palgrave MacMillan, 2023). La perspectiva futura de la industria podría ser lograr una economía con cero emisiones netas, con productos, servicios, procesos y sistemas de producción cero emisiones netas. Esto incluye encontrar soluciones para la energía verde, la conservación del agua, las emisiones cero, la reducción de residuos y la gestión del enfoque cradle-to-cradle, abordando los impactos ecológicos positivos en el entorno.
La convergencia de la investigación basada en desafíos con el aprendizaje continuo y la innovación se ha convertido en la nueva tendencia del modelado de negocios. En la interacción entre los investigadores a nivel global es cada vez más un requisito utilizar habilidades de pensamiento creativo para enfrentar los desafíos sociales, ecológicos e industriales.
Este tipo aprendizaje ha sido adoptado por muchas empresas y ha recibido una mayor atención de la academia. A medida que aumenta la conexión entre los avances sociales e industriales, las tecnologías digitales fomentan cada vez más la investigación basada en desafíos en temas como agricultura, emprendimiento no agrícola, vivienda, energía y sostenibilidad.
Por otro lado, la investigación y el aprendizaje basados en desafíos incitan a las empresas a desarrollar innovaciones y tecnologías frugales, lo que conduce a propuestas de valor superiores dentro de la sociedad y la industria. Por ejemplo, viviendas ecológicas y de bajo costo que utilizan botellas de polietileno recicladas, invernaderos inteligentes para apoyar el cultivo orgánico y productos domésticos basados en energías renovables, como sistemas de calentamiento de agua. En consecuencia, mediante soluciones accionables, la investigación basada en desafíos puede crear valor social y aprovechar las necesidades de la industria.
Este tipo de investigación ha sido adoptado por muchas empresas centradas en el cliente como LEGO, que utilizan la inteligencia colectiva generada por las masas. De ser una alternativa de bajo costo a los bloques de construcción de madera, esta empresa se ha convertido en un gigante de los bloques de construcción impulsados por la tecnología, gracias a las aportaciones de los clientes y el análisis de su personalidad y comportamiento. El crowdsourcing se ha convertido en una herramienta creativa para que las empresas amplíen su alcance a los clientes, mapeen sus percepciones y comprendan las implicaciones de su comportamiento. Así, esta herramienta ha promovido la inteligencia colectiva para apoyar al crecimiento del negocio.
Uno de los principales objetivos de la investigación basada en desafíos es administrar de manera efectiva la transferencia de tecnología a la industria y a los usuarios finales de la innovación. Transferir la tecnología de productos y procesos de acuerdo con la demanda del mercado e inculcar la experiencia del usuario es algo complejo. La investigación basada en desafíos confía la transferencia de conocimientos, en gran medida, al intercambio de experiencias individuales y aspectos relacionados con el trabajo del equipo de investigación.
Por lo tanto, el diseño y la comercialización de productos innovadores están estrechamente relacionados con el proceso de cocreación a través del compromiso del cliente/usuario. Estas tecnologías –cocreadas y coevolucionadas— son fáciles de transferir a través de plataformas digitales y aplicaciones sociales. Si por un lado el intercambio de conocimientos específicos deriva de la inteligencia colectiva, por el otro, la investigación colaborativa con otras empresas conduce a un proceso acelerado de transferencia de tecnología en la difusión de innovaciones entre los usuarios objetivo, la industria y el mercado.
La agilidad y la transformación ágil son dos facetas relacionadas con el desempeño empresarial. Se requiere agilidad en la gestión de retos sociales y tecnológicos para realizar investigaciones basadas en desafíos, implementar sus resultados y medir la capacidad de respuesta de la industria en innovación y tecnología derivada de la investigación. Las concepciones sociales, las tecnologías y los valores del usuario final –que rigen las estrategias comerciales– inducen un cambio de mentalidad entre los consumidores. Además de satisfacer al cliente, la mayoría de estos modelos están impulsados principalmente por los valores corporativos al priorizar a las personas y la agilidad operativa.
Este tipo de investigación también se utiliza en la innovación de productos y el diseño de equipos. La evolución conjunta entre la academia, los stakeholders y las empresas ayuda a estas últimas a identificar tecnologías apropiadas, llevar a cabo innovaciones y prepararse para una transferencia de tecnología efectiva a través de programas de capacitación en plataformas presenciales y digitales. A medida que las empresas se dedican a la creación conjunta de valor en los mercados, aumenta el impulso de la transformación digital. Por ejemplo, las tecnologías digitales han fomentado la inteligencia artificial, una de las tecnologías que está teniendo un mayor impacto.
La mayoría de las empresas de mercados emergentes está transformando sus cadenas de valor globales en conjunto con empresas multinacionales en un efecto helicoidal. El efecto hélice es evidente para las empresas asociadas verticalmente con grandes empresas, mientras que las colaboraciones horizontales con la red local se orquestan de manera conjunta. La exploración de nuevas oportunidades, la toma de decisiones correctas y una estrategia de diseño para el mercado mediante la creación de alianzas con grandes empresas ha sido el principal enfoque de la estrategia de doble hélice.
Para tener éxito, esta estrategia necesita un liderazgo transformacional en las organizaciones involucradas. Así, se contribuye al rediseño de la organización, la creación de una cadena de valor, el desarrollo de estándares globales, la inversión en la mejora de los procesos de negocio y el fortalecimiento de sus vínculos.
La investigación basada en desafíos se centra en evaluar las alternativas productivas y comerciales a través de la digitalización y las redes. Las aplicaciones móviles también han contribuido en gran medida a propagar el uso de plataformas en línea para administrar las actividades B2C y B2B durante la situación de pandemia de Covid-19.
Durante las turbulencias vividas por las empresas y la economía, la innovación frugal ha adquirido una importancia significativa. Este tipo de innovación ha surgido como una forma novedosa de servir a los clientes de bajos ingresos en los países en desarrollo y de fomentar modelos de negocios de nicho. En este sentido, surge la necesidad de encontrar y adoptar nuevas plataformas tecnológicas diseñadas para ofrecer servicios estratégicos para startups en los mercados emergentes.
Los autores son profesor y director del Institute of Advanced Materials for Sustainable Manufacturing del Tecnológico de Monterrey (Dr. Arturo Molina) y profesor de Marketing, Gestión, Innovación y Emprendimiento en EGADE Business School (Dr. Rajagopal).