Recientemente, el billonario empresario Elon Musk decidió migrar sus oficinas corporativas al estado de Texas. Así como él se han observado influjos importantes de inversión en el estado, sobre todo en el sector de tecnología. Pero ¿por qué Texas está atrayendo capitales e inversión?
Son varios los factores que resultan favorables para la atracción de inversión en el estado fronterizo. Primero, por su política de bajos impuestos en comparación con otros estados de la Unión Americana. Su política tributaria está provocando una migración importante de californianos y en general de estados con altos impuestos hacia el estado texano. Segundo, por la innovación y hubs tecnológicos que se están desarrollando en el estado, particularmente en la ciudad de Austin. Además, la sólida calidad de la educación universitaria alimenta año con año a las empresas que requieren de capital humano calificado.
En materia económica el estado tiene un futuro promisorio. El gobierno promueve activamente el emprendimiento lo que resulta en la generación de miles de empresas al año. La constitución de una empresa es rápida y expedita. La constante generación de empresas se refleja en una baja tasa de desempleo y un mercado laboral muy flexible. El sector financiero es amplio y regional lo que aumenta la oferta de financiamiento para las familias y empresas. Además, existen muchos angel investors que están continuamente buscando opciones de tener un mayor retorno, en el contexto de una economía con bajas tasas de interés.
La nueva política federal que impulsa a las energías renovables le cambiará el rostro al estado. De uno dependiente del petróleo y combustibles fósiles a uno de autoabastecimiento de energía eólica y solar. Existen fuertes incentivos fiscales y de financiamiento para acelerar el autoabastecimiento en la región. Estas políticas resultarán en un aumento de la productividad de las empresas.
Este conjunto de factores tendrá un impacto favorable para elevar el crecimiento potencial del estado. La reducción de los costos de energía y el impulso del sector tecnológico (que tiene un valor agregado alto en la producción) aunado a un capital humano calificado son los componentes adecuados para tener tasas de crecimiento altas sostenibles.
El autor es profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School.
Publicado originalmente en El Financiero.