El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó el indicador oportuno de la actividad económica (IOAE) para el mes de marzo donde se estima una contracción de 2.1% en términos anuales. Al interior, la variación anual esperada de las actividades secundarias es de -0.9%, después de una caída de 3.1% en febrero. El sector servicios en cambio se espera haya disminuido 3.1% en marzo después de una caída de 4.3%.
Así, el dualismo de la economía mexicana se observa claramente en estos indicadores. Es decir, mientras el sector industrial se recupera rápidamente, el de los servicios continúa con un ritmo de crecimiento moderado. Es importante recordar que, si bien, se espera una caída del sector industrial en marzo, los indicadores más recientes de la balanza comercial son optimistas para el sector manufacturero hacia el futuro. Esperamos que la economía crezca 4.5% en 2021.
El INEGI publicó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) para el mes de marzo, ubicando la tasa de desempleo en 3.9%. Así, la tasa de desempleo registra un aumento de 32.6% anual. Asimismo, la tasa de informalidad se ubicó en 56.8%, es decir, un deterioro del 55.7% en el mismo mes de 2020. Con cifras ajustadas por estacionalidad, la tasa de desempleo se ubicó en 4.4%, es decir, una contracción de 0.9% mensual.
Así, si bien, la tasa de desempleo está mejorando lo hace a un ritmo gradual. Es decir, esperamos que la recuperación del sector laboral se lleve a cabo de manera lenta y prolongada. Lo anterior debido a la fuerte pérdida de empleo formal e informal en 2020 y el cierre de cientos de miles de Pymes que serán difíciles de recuperar. Asimismo, esperamos que la recuperación del empleo del sector industrial, el más relacionado con el sector externo, será mucho más dinámico que la del sector servicios.
El INEGI publicó la inflación de la primera quincena de abril ubicándose en 6.05%. Al interior la inflación subyacente permanece casi sin cambios en 4.1% en términos anuales comparado con la segunda quincena de marzo. Por otro lado, la inflación no subyacente continúa su tendencia al alza al ubicarse en 12.2% en su comparativo anual. Lo anterior se explica, principalmente, por la aceleración de los precios energéticos los cuales crecieron 19.4% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Así, la inflación de la primera quincena de abril muestra un incremento importante, si bien, se debe principalmente a una base de comparación inferior en 2020. El impacto en la disminución de la demanda el año anterior provocó una reducción generalizada de los precios. En particular destaca la fuerte desaceleración de los precios energéticos en 2020 que están contaminando a la inflación general este año. Sin embargo, es importante destacar que la inflación subyacente persiste por encima del rango de variabilidad del Banco de México sobre todo el subsector de mercancías. Así, creemos que Banxico revertirá su postura dovish y pensará en una política monetaria restrictiva hacia el segundo semestre del año.
El INEGI publicó las ventas al menudeo del mes de febrero que se contrajeron 6.3% en términos anuales. Con cifras ajustadas por estacionalidad, las ventas crecieron 1.6% en su comparativo mensual, lo cual representó un crecimiento de 1.2% trimestral anualizado, una desaceleración de 10.2% 3m/3m anualizado observada en enero. Al interior, destaca la recuperación mensual del sector de autoservicios y departamentales (4%), productos textiles (5.7%) y artículos de papelería (5.1%). En contraste, el sector de artículos de cuidado de salud se contrajo 3.5% en términos mensuales.
Así, las ventas al menudeo ligan 2 meses de crecimiento secuencial indicativo de la recuperación de la actividad económica. Esperamos hacia futuro que este indicador continúe al alza, si bien, a un ritmo moderado de la mano de la lenta recuperación del empleo formal y de la creación de Pymes.
Vanessa Bonilla Hernández
Analista Económica
Jorge Palacio Garza
Analista Económico
Jesús Gustavo Garza García, PhD
Director General