El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó la inflación para la primera quincena de enero 2021, la cual sorprendió al alza ubicándose en 3.3% anual. En su comparativo quincenal, tanto la inflación subyacente como la no subyacente, mostraron los incrementos más altos desde 2017 (0.24% y 1.37%, respectivamente). En términos anuales, la inflación subyacente se ubicó cerca del techo de variabilidad del Banco de México (3.8% anual). Al interior, destaca la elevada inflación de las mercancías, ubicándose en 5.4% anual y consolidando 19 meses consecutivos por encima del rango de variabilidad de Banxico (+/- 1%, 3%). En contraste, el sector servicios se mantiene anclado por debajo del centro de la meta en 2.14% anual.
Por otro lado, la inflación no subyacente se ubicó en 1.84% anual en la primera quincena del mes de enero (vs. 0.92% en la segunda quincena de diciembre). Este aumento se puede explicar, particularmente, por la aceleración en el nivel de precios del sector energéticos y tarifas de gobierno (1.5% vs -0.3% en la segunda quincena de diciembre). Lo anterior es resultado del aumento del IEPS a las gasolinas. En contraste, los precios agropecuarios se mantuvieron casi sin cambios (2.3% vs. 2.6% anual).
Así, los datos recientes de la inflación complican la decisión de política monetaria en el país sobre todo por el nivel persistentemente alto de las mercancías. Asimismo, los recientes incrementos en los precios del petróleo y de los energéticos (relacionados con los combustibles fósiles), podrían contaminar a la inflación no subyacente. Esperamos que la inflación termine el año en 3.6%.
El INEGI publicó la tasa de desempleo al mes de diciembre, la cual se ubicó en 3.8%, es decir, 30.9% mayor al mismo nivel de diciembre 2019. Al interior, la población económicamente activa fue 56.4% comparado con 60.16% en el mismo mes del año anterior. Cabe destacar que el nivel de la PEA previo a la pandemia (febrero 2020) era de 60.12%, lo cual indica una contracción del 6.2% en la población económicamente activa. Es decir, las personas que dejaron de buscar empleo aumentó en este periodo. Con series ajustadas por estacionalidad, la tasa de desempleo fue de 4.4% en diciembre 2020, consolidando 6 meses a la baja (5.3% en junio 2020). Así, si bien se observa una recuperación en la fuerza laboral, el nivel de desempleo aún se encuentra por arriba de su comparativo anual (3.3% en diciembre 2019).
Hacia adelante, esperamos una recuperación del empleo, si bien, a un ritmo moderado. La mayor reactivación de la fuerza laboral en el país, sin embargo, se dará en el sector industrial manufacturero como resultado a un mayor dinamismo de la económica estadounidense. En contraste, la recuperación del empleo en el sector de servicios será mucho más lenta, debido al cierre de cientos de miles de Pymes.
Vanessa Bonilla Hernández
Analista Económica
Jorge Palacio Garza
Analista Económico
Jesús G. Garza García, PhD
Director General